Como casi todas las actividades económicas del país, la automotriz es una de las más afectadas por la paralización total que produjo la instauración de la cuarentena desde marzo pasado. Con un semestre donde todo cambió por completo, la venta de autos usados también se derrumbó con un retroceso de casi el 22 por ciento en las ventas en comparación con el año anterior, de acuerdo a los datos de la Cámara de Comercio Automotor (CCA).
Rubén Jara Ibaceta, de Fan Autos con Historia, hizo referencia al tema y señaló que «la clave para que el negocio se reactive es la apertura parcial de ciertas actividades lo que deviene en una mayor circulación de personas tanto en el AMBA como en el resto del país». El negocio de la compra venta de autos usados básicamente depende de poder vender, poder comprar y tener interacción total con la unidad y las partes intervinientes. ¿Qué significa esto? Que virtualmente se pueden realizar acciones, pero el negocio depende casi exclusivamente de la presencia física.
Asimismo, según Jara Ibaceta, «otra de las claves para reactivar el mercado de autos usados es la actualidad de la oferta y la demanda. Es el momento ideal para comprar un auto. La sobreoferta actual permite a los interesados en comprar negociar buenos descuentos con las concesionarias que están ávidas de vender para que haya rotación de stock. Esto permite, además, que sea un mejor momento para entregar el auto como parte de pago ya que se puede recibir un monto mayor. Hay necesidad de venta y los compradores pueden encontrar muy buenas opciones».
Otro factor importante para este rubro es la baja oferta de autos 0KM que, a su vez, debería impulsar la venta de los usados. «Hay terminales y marcas internacionales que están con quiebres de stock y los plazos de entrega pueden superar los tres meses. Además, las automotrices muchas veces tampoco pueden confirmar los precios finales de venta por los movimientos del dólar», detallan desde FAN Autos.
Ranking de venta de usados
Desde AutoNorte Pilar, agencia de autos usados en Escobar, Pilar y Ushuaia con más de 30 años en el mercado, advierten que a medida que pasó el tiempo, los compradores de autos usados comenzaron a pedir más financiación, algo que choca contra la inestabilidad cambiaria del país. Para Carlos Villasur, uno de los referentes del rubro y fundador de Autonorte, «dar cuotas a largo plazo es determinante para poder acceder a una unidad. Esta posibilidad es una de las pocas herramientas para lograr la decisión de compra». A su vez, añade: «Para que este negocio funcione, es necesario alcanzar el equilibrio entre lo que uno compra y lo que uno vende por eso es clave la financiación, el interés, el dólar y la inestabilidad general».
«Además, esta sorpresiva pandemia que paralizó sin tiempo de reaccionar a toda la economía, produce otros daños que también afecta al negocio de la compra venta de autos usados. ¿Por qué? Porque con la actualidad económica del momento y la crisis se derrumba la venta de unidades 0KM que, a su vez, impacta en el negocio de los usados, por eso el escenario es más complejo del que se supone», remarcó el referente de zona norte.
Por el cierre total de las concesionarias en marzo, abril, mayo y casi junio, no llegaron a comercializarse cerca de 230.000 autos. La recuperación es y seguirá lenta y paulatinamente, a merced a su vez de las condiciones económicas y financieras que, una vez más, ponen en jaque el bolsillo de las personas, las familias, las empresas y las distintas industrias.