BUENOS AIRES.- El famoso trencito “Expreso Alegría”, que atraviesa todo el Parque Avellaneda, en uno de los rincones de la Ciudad de Buenos Aires, sigue acumulando historias todos los sábados de 11 a 13 y de 14 a 17 horas.
Después de casi 10 años sin funcionar, en febrero del 2016 volvió a rodar sobre sus vías que atraviesan el Parque, deslumbrando a los pasajeros con la casona de la familia Olivera, el Jardín de la Meditación, el vivero, las obras de artes y la calesita, entre otras cosas. Es un viaje de anécdotas, ya que allí viajaron todo tipo de personas, desde niños a adultos, desde perfectos desconocidos a famosos como músicos o artistas que pasaron por el Antiguo Tambo.
Su reparación y vuelta a funcionamiento también tiene una gran historia, ya que sus históricos conductores, que también se encargaban de su mantenimiento, trabajaron a la par del Gobierno de la Ciudad para nuevamente este atractivo del parque sea una realidad y no quedara cajoneado como un proyecto.
Tiene un recorrido de aproximadamente 15 minutos y va a 6 kilómetros por hora. El pasaje es gratuito para que todos puedan disfrutar de este atractivo que fue creado en 1908, pero no para el parque, sino para el Zoológico de la Ciudad de Buenos Aires, su primer hogar, y luego, en 1929 llevado a este barrio, atravesado por Directorio y Lacarra.