BUENOS AIRES (Télam) – Hace rato que se sabe que Argentina es uno de los países con más alta tasa de emprendedores del mundo, monitoreado esto por el GEM (Global Entrepreneurship Monitor). Ahora, según el Indice de Condiciones Sistémicas para la Creación de Empresas Dinámicas (Icsed), la Argentina se ubicó en el tercer lugar detrás de Chile y Brasil en cuanto al ambiente favorable para el surgimiento de emprendimientos de impacto en la creación de valor y empleos.
En tanto, a nivel global el país se ubica en el puesto 39, lo que se traduce en un salto respecto a 2016, cuando el país se ubicó en el puesto 7 del ránking de América Latina.
El reporte, elaborado por el Programa de Desarrollo Emprendedor (Prodem), mide una serie de indicadores como cultura emprendedora, acceso al financiamiento y existencia de programas de apoyo e incubadoras para empresas nacientes.
Así, Argentina ratifica su liderazgo en la capacidad productiva al momento de generar nuevas ideas de negocio. Sin embargo, por el contrario, no cambia la otra cara de la moneda: muchos emprendedores pero muchos fracasos con poca existencia de los negocios iniciados.