BUENOS AIRES.- Érase una vez una persona que trabajaba sola (es decir, yo). Ofrecía servicios de informática y trabajaba muchas horas. Pero no ganaba gran cosa. Hoy día, esto ha cambiado. Gano mucho más que antes. ¿La razón? Me encuentro a cargo de 10 personas que ofrecen los servicios de informática por mí. Yo sólo recibo el dinero.
¿Quieres dejar tu empleo y ser un freelancer, un “negocio de una sola persona”? Tengo malas noticias para ti, y necesitas escucharlas antes de que sea demasiado tarde: no podrás ganar mucho dinero si trabajas por tu cuenta. Tal vez, sólo tal vez, obtengas los ingresos necesarios para vivir bien… pero no pasará de ahí. ¿Por qué?
Primero que nada, hagamos cuentas. La semana tiene un número limitado de horas. Si trabajas solo, aunque cobres 100 dólares por hora, no podrás ganar más de 5 mil dólares en una semana de 50 horas. Eso se traduce en 20 mil dólares por mes o 240 mil dólares por año. ¿No suena tan mal? Quizá no, pero déjame decirte que esto está completamente alejado de la realidad.
Para empezar, no hay forma de que puedas trabajar 50 horas por semana. Ya que estarás solo, necesitarás pasar tiempo haciendo trámites, tareas administrativas, papeleo, y sobre todo, buscando más trabajo para cuando el actual se termine (siempre se termina). Podrías pasar fácilmente la mitad de tu tiempo haciendo eso.
Esto significa que podrías ganar 120 mil dólares por año, lo cual no está mal. Pero considera que tendrás gastos, como renta, transporte, reparaciones, insumos, computadoras y mil cosas más. Tus gastos probablemente ascenderán a varios miles de dólares al mes, así que asumamos que, después de hacerlos, te quedes con 80 mil dólares netos. Después de eso todavía deberás pagar impuestos (muchos impuestos). Así que réstale 30 por ciento a lo que te quedaba, y te quedarán 56 mil dólares para vivir.
Esos son los números duros. ¿Estás seguro de que aún quieres hacer esto?
Bueno, si lo decides, aun así no podrás hacerlo sin ayuda. Necesitarás gente. Y no me refiero a vendedores: tú debes ser el único vendedor. ¿Dices que no eres un buen vendedor? La cosa se complica, porque tú eres la única persona con la credibilidad suficiente para hablar con los clientes.
Es tu negocio, tu especialidad, tu área de expertise. Al final, un cliente no compra de tu negocio: la realidad es que te está contratando. Tú eres el producto. Así que tú debes ser el que vende. Si no te gusta vender, no empieces tu negocio freelance. Así de sencillo.
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Los dueños de negocios exitosos son, en esencia, buenos vendedores. Bill Gates es un programador de formación, pero para construir Microsoft tuvo que vender Windows. No puedes darte el lujo de contratar un vendedor, y ningún vendedor trabajará para ti sólo para recibir una comisión.
¿Lo que realmente necesitas? Un socio (o dos, o tres…). No puedes hacerlo todo tú solo, así que deberás encontrar otras personas que complementen tus habilidades. ¿Eres un desarrollador de software independiente? Asóciate con un par de profesionales en TI independientes. ¿Eres un contador público certificado especializado en impuestos? Asóciate con un abogado.
Todos tenemos un área de especialidad. Pero si unes esfuerzos con personas con otras especialidades, en conjunto podrán ofrecer mucho más.
En algún momento, necesitarás personas que trabajen para ti. Esto no será fácil. Tendrás que dejar de ofrecer los servicios tú mismo y confiar en que otros lo hagan por ti.
Al principio lo odiarás: pensarás que nadie podrá hacer el trabajo tan bien como tú. Te costará mucho dejar ir. Siempre querrás estar “ocupado”, y estar “ocupado” significará hacer el trabajo. Pero poco a poco aprenderás que es más importante que otras personas se mantengan ocupadas mientras tú buscas más clientes.
Cuando algo necesite resolverse, eventualmente dejarás de pensar “¿Cómo haré esto?” y pensarás “¿Quién resolverá esto por mí?”. Al principio tus clientes se resistirán: te querrán a ti porque te aman. Pero se acostumbrarán al cambio, y tú encontrarás la manera de hacer la transición.
Conforme lleguen nuevos clientes, este problema eventualmente se disolverá. En algún punto admitirás que las personas que has contratado para ofrecer tus servicios harán un mejor trabajo que tú. Contratar a personas más inteligentes que tú es la forma más segura de ganar dinero. Si ellos son buenos en lo que hacen, tú serás bueno en encontrarles más trabajo para que los clientes paguen por sus servicios. Todos saldrán ganando.
Así que ya lo sabes: deja tu trabajo y conviértete en tu propio jefe. Probablemente tengas una vida más cómoda. Pero si realmente quieres tener éxito y ganar dinero, te darás cuenta de que no podrás hacerlo sin ayuda.