BUENOS AIRES (Redacción) – No todo tiene una explicación absolutamente racional y el ejemplo de ello es el caso Elisa Carrió, quien en medio de un caso tan sensible como la muerte de Santiago Maldonado no dudó en lanzar una pequeña frase que ya quedó en la historia política reciente: «Walt Disney«.
Las expectativas en la Ciudad de Buenos Aires sólo tenían un atractivo especial y era si Carrió perdería votos por comparar el cuerpo del joven artesano con el de Walt Disney, en horario prime time antes las cámaras de televisión.
Pese a ello, Carrió ya logró obtener el 50 por ciento de los votos y, literalmente, arrasó con una elección que revalidó la idea de que en territorio porteño hay una fuertísima resistencia al peronismo y que un candidato puede decir absolutamente todo sin ningún tipo de consecuencias.
Con apenas días de diferencia, la socia política de Macri aseguró que había «un 20% de posibilidades de que Santiago Maldonado esté en Chile con la RAM”, y ante la aparición del cuerpo y el estado del mismo dijo que Maldonado estaba como «Walt Disney».
Muchos, entonces, se preguntan cómo además la candidata oficialista llegó a catalogar a Macri como un «estúpido y corrupto» pero hoy es uno de los mejores presidentes de la historia.
El rol de los medios de comunicación no es la única explicación posible a este fenómeno. Algunos psicólogos aseguran que muchas personas con tal de no volver a vivir algo que no les gusta o desean, prefieren convivir con males iguales o peores. Los porteños decidieron revalidar su apoyo a una Elisa Carrió que sin ningún cargo ejecutivo, con gran apoyo legislativo, ahora deberá decidir si pide un espacio mayor en el Gobierno en un ministerio, se pelea y se abre a una candidatura propia de cara al 2019, o se desinfla en el tiempo.
Por el momento, festeja, como en Walt Disney.