BUENOS AIRES (Redacción) – Cerveceros Argentinos, la Cámara que agrupa a las principales cerveceras del país, celebra que el Gobierno haya decidido no aumentar el impuesto interno a la cerveza. Este aumento hubiese tenido un impacto negativo en toda la cadena de valor de la industria, que incluye a 1.100 productores de cebada, 250 distribuidores, 5.000 proveedores, 400.000 comercios, generando caída de ventas, empleos e inversiones.
Pablo Querol, Presidente de Cerveceros Argentinos expresó “El Gobierno escuchó la preocupación del sector y el impacto que una medida como esta podría implicar en toda la cadena de valor. La carga impositiva total contenida en una cerveza supera el 50%, por eso desde el sector veníamos defendiendo que se trata de una industria con potencial para crecer, con inversiones comprometidas de más de 1800 millones de dólares y con una enorme cantidad de Pymes involucradas que cada día ponen su pasión para hacer cervezas de gran calidad”.
El sector cervecero es una “industria de industrias”, que genera 8.500 puestos de trabajo directos y más de 127.500 indirectos. Con presencia en todo el país a través de 11 cervecerías, 1.000 microcervecerías, 10 centros de distribución y 6 malterías, la industria cervecera logra llegar a más de 400.000 puntos de venta en todo el país, desde Jujuy hasta Tierra del Fuego.
En el caso de la Ciudad de Buenos Aires, la acelerada proliferación de tiendas de cerveza artesanal tomó un impulso vertiginoso acompañado esto de un empuje oficial en inversión, maquinaria, capacitación y tecnología. Sin embargo, la reforma impositiva impulsada por el Gobierno nacional con un impuesto a la cerveza y al vino complicó los planes de muchos emprendedores.
Finalmente, hubo marcha atrás y el boom de las cervezas artesanales seguirá su camino.