BUENO AIRES.- La construcción del Barrio Olímpico fue la gran promesa para tener un nuevo desarrollo habitacional en el sur de la ciudad de Buenos Aires, la región más olvidada de la urbe porteña que en medio de una crisis económica que apunta a ser tan grave como la de años pasados, tiene sus principales víctimas a quienes están en el límite de la línea de pobreza.
En ese marco, hace tiempo se abrió la inscripción para participar de la cesión de viviendas del Barrio Olímpico, que servirán de villa olímpica una vez concluidos los Juegos Olímpicos de la Juventud 2019 para pasar a ser habitada por los habitantes de las comunas del sur.
Sin embargo, durante la apertura de la inscripción hubo reiteradas denuncias sobre el proceso para poder participar de la selección y sorteo del complejo habitacional. El mismo se encuentra muy próximo a otro desarrollo habitacional, el Papa Francisco, el mismo lugar donde hubo un desalojo masivo de las tierras cuando fueron usurpadas y loteadas ilegalmente.
El Instituto de la Vivienda de la Ciudad (IVC), encabezado por Juan Ignacio Maqueyra, está a cargo de la adjudicación de las unidades, a las que se podrá acceder a través de un crédito que otorgará el Banco Ciudad y que tendrán costos por debajo del valor de mercado, un incentivo con el que se pretende atraer a familias o parejas de clase media en busca de la casa propia.
Con cuotas similares a las de un alquiler, el que impulsa el Gobierno de la Ciudad para los departamentos de la Villa Olímpica es el crédito con la tasa más baja del mercado (4,99%). Este apunta a ayudar a los vecinos a sortear las que hoy se postulan como las dos grandes barreras a la hora acceder: el ahorro previo necesario y la capacidad de demostrar ingresos.