BUENOS AIRES (Agencia) – En el mundo del marketing digital existe una fórmula que muchas veces puede darnos dolor de cabeza: el ROI (Return On Investment o Retorno de Inversión), que básicamente nos indica el beneficio que se obtiene de una inversión; visto de otro modo, es una herramienta necesaria para evaluar las estrategias, medir el rendimiento económico de las mismas y considerar su continuación o mejoramiento.
“Aunque no lo reconozcan, muchas empresas se preguntan no sólo cómo medir el ROI, sino qué es exactamente y cómo cuenta o debe contar dentro de las estrategias digitales”, aseguró Carolina Samsing, directora de Marketing para Iberoamérica en HubSpot, la plataforma que ayuda a los negocios a crecer mejor.
De acuerdo con el informe “Estado de Inbound 2018 en Latinoamérica”, una de las principales prioridades (31%) de las empresas en la región en 2019 es precisamente demostrar el ROI de las actividades de marketing, así como obtener el mayor retorno con un presupuesto limitado.
Los elementos básicos para medir el ROI siguen estos pasos: tener el volumen y tráfico, el porcentaje de conversión, la cantidad de clientes potenciales, el porcentaje de cierre y la cantidad de clientes. Para calcularlo de una manera básica, existe una fórmula predeterminada:
ROI = (beneficio obtenido – inversión) / inversión x 100
De esta manera, imaginemos una inversión de 2,000 dólares y se han obtenido 6,000. Por lo que el cálculo del ROI es 6,000 – 2,000 / 2,000 = 2. La multiplicación x 100 es porque el valor del ROI se expone en porcentaje, por lo que 2 x 100 = 200%. Es decir, se está ganando un 200% del dinero invertido; dicho de otro modo: por cada dólar se están generando dos dólares
Por otro lado, existen calculadoras en línea de los que las empresas se pueden ayudar, o bien guías avanzadas para comprender y medir el retorno de inversión de manera estratégica.
“Hoy día, demostrar el ROI se ha vuelto no sólo un desafío, sino un requisito si el objetivo es convertir más clientes y generar más ingresos a partir de los clientes existentes. Es por ello que las empresas tienen que ir más allá, ser capaces de medir y demostrar el ROI de manera sistemática para que las organizaciones estén al día con los nuevos retos”, concluyó Samsing.