BUENOS AIRES (Redacción) – El 15 de setiembre pasado el sector vitivinícola recuperó la libertad para hacer campañas en la vía pública de Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Si bien el sector quedó atado a una serie de requisitos, las condiciones son mucho menos exigentes que las que rigen para el resto de las bebidas alcohólicas.
Cabe recordar que la Ley 24.788 prohibió toda publicidad o incentivo de consumo de bebidas alcohólicas en la vía pública de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, exceptuando sólo a aquellos avisos que usen un 75% de su espacio para advertir sobre los riesgos del consumo en exceso.
El vino, por ser Bebida Nacional, quedaba liberado de esa reglamentación, pero con la condición de que el Ministerio de Agroindustria de la Nación elaborara un plan de acción para la publicidad vitivinícola.
Pasaron varios meses sin que se hiciera ese trabajo y las bodegas se vieron obligadas a adaptarse a la restricción impuesta para el resto de las bebidas alcohólicas. Sin embargo, las cámaras empresarias y los funcionarios provinciales se unieron para defender a la actividad vitivinícola y reclamaron al Gobierno nacional que creara el plan de acción pendiente.
El pedido finalmente fue escuchado y el 15 de setiembre se firmó la normativa que contiene el esquema de trabajo tan esperado.
Fue a través de la Resolución 253-E/2017 que incluyeron las nuevas condiciones. La misma indica que las campañas de comunicación a cargo de organismos de promoción y de las empresas de la cadena de valor vitivinícola deben incorporar la leyenda “Vino Bebida Nacional” o el isologo en sus comunicaciones en la vía pública, medios gráficos, digitales y cualquier otra forma de promoción con tamaño no menor al 10%.
Además, se estableció un calendario de eventos que incluye la celebración del Vino Bebida Nacional, la Jornada “Alimentos Icónicos Argentinos: vino, mate y carne”; la Semana del Vino Argentino; Buenos Aires Capital Iberoamericana de la Cultura Gastronómica y la Semana del Malbec.
Por otra parte, se establecieron una serie de metas que se utilizarán para medir el éxito de las campañas. Se controlará por ejemplo el número de botellas comercializadas en el mercado interno que contengan el isologo, la presencia de la imagen en las redes sociales y la cantidad de personas que conocen el isologo.