BUENOS AIRES (Redacción) – Su perfil lo define por sí mismo. Daniel Colombo nació en Maipú, una pequeña ciudad de la provincia de Buenos Aires, y se desempeña en medios de comunicación desde los ocho años. Actualmente colabora regularmente con artículos de su autoría en Infobae.com, América Economía, YoungMarketing.co (Colombia), RoasBrief.com (México), además de diarios, revistas, emisoras de radio y programas de TV en Hispanoamérica, entre otros medios de alcance internacional. Pero hoy, en medio de una apretadísima agenda, el comunicador y coach de alta gerencia dialogó con CiudadEmprende.com.
Ciudad Emprende: ¿Cómo ves hoy la comunicación en el ámbito de las pymes y emprendimientos?
Daniel Colombo: En las Pymes y emprendimientos, si bien hay un crecimiento en la intención de considerar a la comunicación como un activo de las empresas, aún hoy se percibe una cierta confusión sobre los resultados que se podrán obtener, y la mezcla entre publicidad, marketing y comunicación institucional. El aspecto positivo es el crecimiento de la conciencia del mundo digital aplicado a los negocios; y, por esta razón, muchos emprendedores están empezando a considerar la posibilidad de generar más y mejor contenido. No sólo contenidos promocionales -típicos de la publicidad o el marketing- sino de fondo, tarea propia de la comunicación institucional y las relaciones públicas. Aún hay un camino largo por recorrer; si bien hay un pequeño avance respecto a los últimos cinco años.
CE: ¿Les dan éstas más importancia al momento de invertir en comunicación?
DC: En línea con lo anterior, no hay aún una conciencia lo suficientemente desarrollada ni madura sobre la necesidad de asignar recursos apropiados para la gestión integral de la comunicación. Hay mucha improvisación y amiguismo. Por otro lado, las empresas piensan que se resuelve todo con redes sociales, y ésta es sólo una parte del tema. Hay productos muy valiosos que -en mi percepción- están perdiendo enormes oportunidades de crecimiento, que les traería la comunicación hecha profesionalmente. En otras palabras, la tendencia a subestimar o dejar para lo último, y con recursos exiguos a la comunicación, es lo que, en muchos casos, hace fracasar los proyectos aunque sean muy atractivos. Por eso la inversión es muy acotada, poco específica dentro de los planes de negocios -los contadores y analistas de negocios tampoco saben de comunicación- y por eso, es un combo poco considerado al menos hasta el presente.
CE: ¿Cómo es posible vender más a través de la una comunicación efectiva?
DC: La comunicación no necesariamente va a generar ventas en el sentido tradicional, como sí lo hace el marketing o la publicidad bien realizada y direccionada. Lo que sí puedo aseverar por experiencias en más de 2500 empresas y proyectos que he atendido hasta ahora, es que perderás una oportunidad magnífica de potenciar tu negocio si no haces comunicación institucional y relaciones públicas.
Hoy no es posible desarrollar proyectos sin contar con la pata de la comunicación y las relaciones públicas; y es más: sin un excelente profesional de estas áreas en el equipo permanente de la empresa. La comunicación hoy es tan relevante como impulsor de ventas, como el propio gerente comercial o de marketing; o de desarrollo de producto. Por lo que obviar en el equipo a profesionales del sector, me parece un gravísimo error. El que omite esta parte estratégica, pierde. Y pierde mucho dinero. Pierde en reputación; pierde en conocimiento masivo o segmentado; pierde mucho tiempo, que sí puede ganarlo comunicando apropiadamente.
CE: ¿Avanzan las empresas en campañas de comunicación digital?
DC: Sí, y cada vez más. El problema básico que observo, al menos en el Cono Sur, es que hay una brecha muy grande respecto a lo que es generación de contenidos de calidad. Un buen flyer con diseño, o promos de producto, son más sencillos de resolver que una pieza de comunicación institucional profesional. ¿Por qué? Porque hay que reunir habilidad, conocimiento, estrategia y combinar todos los elementos para crear comunicaciones de impacto, que transmitan la experiencia de las marcas en los usuarios y potenciales clientes; y para esto, se necesita ineludiblemente del capital humano profesional, que no son solamente community managers o desarrolladores tecnológicos: hay que tener una visión estratégica de la comunicación.
CE: ¿Qué tan importante es invertir en comunicación en redes sociales?
DC: Es fundamental actualmente; aunque no es lo único. Y sobre todo, teniendo en cuenta cuál es el objetivo al público al que te dirigís. Si quisieras, por ejemplo, llegar a segmentos de alta gama y consumo, no siempre la comunicación digital es la mejor, excepto que crees productos de valor agregado que se sustenten en el mundo digital, o interactúen con éste justo para esos nichos. Aunque, en términos de presencia institucional, producto, desarrollo de marca, siempre es conveniente estar y seguir abriendo canales.
Otro error muy frecuente es que muchas empresas empiezan a comunicar en el entorno digital, y, sin embargo, al poco tiempo, lo discontinúan o dan de baja. Por eso, la persistencia y continuidad con claves tanto en lo digital, como también en la inversión en comunicación institucional, relaciones públicas, marketing y publicidad. Aún con pocos recursos disponibles, es factible lograr muy buenos resultados.
CE: ¿Cómo influye en emprendedores y empresarios hacer coaching?
DC: El coaching, y específicamente, la nueva corriente de esta disciplina, llamada “Neurocoaching”, es fundamental en el desarrollo empresarial. Claro que hay empresas que no necesitan un neurocoach o un coach convencional como los que mucha gente puede conocer. Sin embargo, el resultado es altamente motivador, enfocado en el éxito, la proyección, visiones alternativas del negocio y un canal de mejora continua. A veces llama mucho la atención que las empresas de todo nivel -pequeñas, grandes, medianas-, envían a sus empleados a hacer programas de coaching, y los propios directivos y jefes no. Entonces se produce una brecha en la cultura interna que resulta insalvable en el tiempo. Recomiendo hacerlo en todos los niveles. En mi caso, me especializo en alta gerencia, emprendedores y profesionales. Y trabajo en todos los niveles hacia el éxito de los negocios y el bienestar corporativo. He tenido casos de éxito muy notables en el trabajo con personas comprometidas y dedicadas a desarrollar mejor sus habilidades a través del Neuro coaching; y han logrado en menos de un año lo que pensaban hacer en cinco. Es así de diferente el antes y después de cada proceso.