BUENOS AIRES (Redacción) – ¿Es Argentina un país indomable, impredecible y excesivamente complicado al momento de querer llevar adelante un emprendimiento? Sí, y mucho más también. Sin embargo, aún con tantos adjetivos negativos, podemos ver cómo hay emprendimientos que ponen primera en territorio porteño pese a todo.
Para entender de qué hablamos, hay que releer los siguiente datos: 1 de cada 10 negocios que se ponen en marcha no llegan ni siquiera a madurar. Incluso, con un contexto favorable. Por eso, en un océano rojo, más que nunca debemos tener todo milimétricamente pensado, correctamente asesorados y rezando por un poco de buena suerte.
Según FECOBA, sigue en caída libre la cantidad de locales vacíos en la ciudad de Buenos Aires. Allí hay miles de emprendedores apostando por negocios de todo tipo, desde los más tradicionales hasta otros más innovadores, pero todos con el mismo problema:
1- Muy poca previsibilidad
2- Cero financiamiento
3- Impuestos altísimos
4- Tarifas altísimas
5- Débil espalda financiera
Con estos cinco puntos en rojo, es clave la asistencia de un profesional que marque paso a paso el camino a seguir, el modelo de negocio, el día a día y, clave, el manejo de los recursos. Esto último, milimétricamente coordinado, será determinante para poder apostar a horizontes más lejanos.
En otros países no tan alejados de Argentina como Chile, un negocio que debuta en el mercado puede recuperar inversión y crecer. Acá, la cuestión impositiva y tarifaria ya es el principal enemigo a vencer.