BUENOS AIRES (Redacción) – No hay ecuación, ni estadística ni cuentas a largo plazo que avizoren un horizonte positivo. Argentina sigue con una economía en rojo, con altos índices de inflación y con un crecimiento estancado. Esto, sumado a la presión impositiva, hace que ser pyme sea casi una agonía sin fin.
En los últimos tres años, cerraron sus puertas más de 110 Pymes metalúrgicas. El dato surge de un nuevo informe del Observatorio Laboral de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) Rosario, y pone en evidencia la difícil situación que atraviesan los trabajadores del sector, uno de los más golpeados por las políticas económicas del gobierno nacional. Según adelantaron desde el gremio, hubo un agravamiento en los últimos cinco meses, en consonancia con el marcado descenso de la actividad industrial, que en noviembre cayó 9,4 por ciento respecto del mismo mes del 2017. Esto llevó a varias empresas locales a presentar procedimientos preventivos de crisis, con más de cinco mil trabajadores afectados, cientos de despidos y retiros voluntarios. Otras bajaron definitivamente las persianas, aunque no todas comunican su baja al sindicato, por lo que el número puede ser mayor, cita el diario Página 12.
Un ejemplo a tomar es el de Rosario. A partir de febrero del 2016 y hasta el 1º de junio de 2017 comunicaron su baja al gremio 72 pymes metalúrgicas que empleaban de uno a 20 trabajadores. Por entonces se perdieron alrededor de 750 puestos de trabajo, aunque desde el gremio aclararon que se quedaban cortos si se tomaban los retiros voluntarios que se produjeron en las grandes empresas del sector.
Durante los meses siguientes y todo el 2108, la situación se tornó cada vez más complicada, afectando a todas las ramas del sector, carroceras, fundiciones, y en particular las fábricas de la denominada línea blanca, quedando todas bajo procedimientos preventivos de crisis, adelantando vacaciones y ofreciendo retiros voluntarios, con caídas en las ventas superiores al 30 por ciento.
Comparándolo con el informe antes mencionado, y en función de lo anticipado a este diario, la baja de empresas comunicadas al gremio y la cantidad de trabajadores despedidos en los últimos cinco meses del año pasado es «sumamente mayor». Los detalles del trabajo del Observatorio Laboral de la UOM serán presentados a las 17. Los metalúrgicos estarán acompañados por referentes de varios gremios rosarinos, quienes apoyarán un documento de siete propuestas, entre ellas el pedido de suspensión de despidos por 180 días.
El secretario General de la UOM Rosario, Antonio Donello, adelantó que «el 2019 será un año de ajuste, en el que el gobierno deberá pagar 21 mil millones de la deuda externa que tomaron. Y eso significa un año de achique y de pérdida del poder adquisitivo. Y eso preocupa porque si no se consume no hay producción y si no hay producción no hay trabajadores».